Wednesday, February 22, 2012

El cepillo de dientes


- Deberías cambiar ese cepillo de dientes, está súper viejo.
- ¡Qué va! Lo compré hace como 4 meses.
- Por eso.
- ¿…?
- Supuestamente tienes que cambiarlo cada 3 meses.
- Entonces no lo debería botar. Ha durado 33% más que el promedio. Es un cepillo de larga duración.
- Ja, ja. Muy chistoso.
- Es más, si puedo hacer que dure seis meses lo convertiría en un cepillo de máxima duración. Estaría usando la mitad de los cepillos de dientes que debería usar a lo largo de mi vida.
- ¡Eso no tiene sentido!
- ¡Claro que sí! Ahorraríamos una fortuna.
- No es cierto. Cada cepillo vale como un dólar.
- Por eso. En un año no es mucho, serían solo dos dólares. Pero, si hacemos el cálculo pensando en toda una vida…
- No serían más de 50 dólares. Es un ahorro ridículo.
- ¿Cuánto te costaron acaso los zapatos que compraste ayer? Eso sí es ridículo.
- Eso no viene al tema. Estamos hablando de tu cepillo de dientes.
- Podríamos gastar todo el dinero que ahorre en cepillos de dientes para comprar zapatos para ti.
- ¿Qué? ¿Cómo mezclas dos temas que no tienen nada que ver el uno con el otro?
- Te apuesto a que los zapatos que compraste ayer no van a durar lo que dura mi cepillo de dientes.
- ¡Deja de hablar de mis zapatos y cambia el cepillo de dientes!
- Bueno, pero después no me digas que no pienso en ti y en lo que necesitas.
- ¿Sabes qué necesito?

- ¿Qué, mi amor?
- Que cambies ese cepillo de dientes.
- ¡Pero lo compré hace cuatro meses!
- ¡Por eso!
- Mira, hagamos un trato. Voy a cambiar el cepillo de dientes…
- ¡Siiii!
- PERO… no voy a botar este.
- ¿Qué?
- Este lo voy a dejar como repuesto. Lo voy a dejar en la guantera del carro.
- ¿Qué? ¿Para qué?
- Para una emergencia. Es mejor lavarse los dientes con un cepillo viejo que no lavárselos.
- En ese caso deberías tener un cepillo de dientes nuevo en la guantera, para una emergencia.
- ESO no tiene sentido.
- ¿Cómo que no?
- Si tengo un cepillo de dientes nuevo lo voy a tener el baño. ¿Para qué voy a querer un cepillo de dientes nuevo en la guantera y otro de cuatro meses en el baño?
- ¿Qué? Eso no fue lo que yo propuse.
- Lo acabas de decir. ¿Me puedo lavar los dientes, de una buena vez?
- Bueno, está bien. Haz lo que se te dé la gana.
- Gracias.
- De nada… Pero deberías cambiar ese cepillo de dientes. Está súper viejo.